En el pasado, la cocina siempre se la ha considerado un espacio donde la única actividad que se realizaba allí era guisar con lo cual lo más práctico era alicatar todo con azulejos bastante grandes, para que no hubiera muchas juntas donde se pudiera quedar incrustada la suciedad del resultado de cocinar horas y horas, porque antes se pasaban todo el día dentro de estas cocinas.
Pero con el paso del tiempo, por suerte se han ido cambiando las costumbres y ya no se pasa tanto tiempo en las cocinas, horas y horas guisando, por lo tanto las cocinas se usan menos y ya no se busca tanto el aspecto práctico, sino el estético. Las viviendas cada vez son más diáfanas uniendo todos los espacios de la vivienda, en este cambio de concepto, la cocina se ha transformado en un espacio de actividad, de reunión que se ha integrado al resto de la vivienda, incluso sin paredes para conectarlas al resto de la casa.
Por economía se suele dejar el alicatado que trae la cocina de la casa, pero se debe pensar si nos gusta el estilo, la pintura y los materiales que otro ha elegido u optar por redecorar la cocina a nuestro gusto. Es primordial sentirte a gusto en tu cocina y con el estilo que te defina. Pero antes de tomar decisiones precipitadas haz algún dibujo simulando lo que realmente quieres hacer en tu cocina, para tener una idea de cual será el resultado final.
Las cocinas con las paredes con yeso y pintura son más fáciles de cambiar sin tener que gastar mucho en el futuro ya que solo tendrías que pintar encima de la ultima capa que tengas antes, pero es mucho más sucia, ya que las manchas de grasa o de aceite no se quitan así como así y aunque venden productos que repelen la grasa y la humedad, estos productos no son milagrosos y tienes que aplicarlo varias veces al año. En cambio los azulejos se limpian muy fácilmente pero el inconveniente será que a la hora de cambiar o redecorar tu cocina se tendrán que cambiar todos los azulejos.
El alicatado sería útil en la parte de más actividad de la cocina, como en la vitrocerámica o en las encimeras, donde sabemos que vamos a manchar con más frecuencia. Para el resto de la cocina podemos optar por la pintura, que dará a tu cocina un ambiente mas acogedor. Ya que el alicatado da una sensación de laboratorio.
Si quieres cambiar el look de tu cocina, aunque ya esté alicatada, puedes enyesar los azulejos con una pasta que se llama Aguaplast, que se adhiere a la cerámica y después puedes lijar la superficie. Para que sea más resistente deberás usar una pintura plástica. Si por el contrario lo que quieres es alicatar tu cocina, lo único que tienes que hacer es limpiar la superficie para que las nuevas baldosas se queden bien fijadas, comprar cemento cola y ponerte a colocar azulejos de manera que no se caigan y queden equilibrados.
A tener en cuenta para el alicatado
Primero tendrás que saber qué muebles vas a colocar, para combinar de manera eficaz tu cocina, ya que no es lo mismo unos muebles rústicos de color marrón con un alicatado moderno con colores grises o blancos. También es importante conocer los tipos de encimera que existen, como las encimeras de acero inoxidable o las de granito o mármol. El suelo también debe estar en armonía con la cocina ya que es el elemento mas visible en una cocina, un truco para que quede más estético es colocar una cenefa en la pared con las mismas tonalidades que la superficie.
Tipos de azulejos
Hay muchas variedades de azulejos para el alicatado de tu cocina, como los azulejos de porcelana o cerámicos, que no son nada porosos y se limpian con facilidad. La particularidad de los azulejos rectificados es que están recortados de manera distinta a los tradicionales, y esto hace que las juntas se vean lo menos posible. El inconveniente es que son mucho más caros. El 'gresite' se puede utilizar tanto para baño como para cocina, es uno de los materiales más novedosos. El inconveniente de éste es que forma muchas juntas, y dificulta su limpieza.
Los colores, texturas y tamaños del alicatado para tu cocina también son aspectos a tener en cuenta ya que existe una diversa gama de colores, las texturas suelen ser lisas y nada porosas, aunque también las hay con texturas y relieves muy creativos. Los formatos generalmente suelen ser rectangulares o cuadrados.
Por último los precios suelen cambiar según el fabricante, los tamaños y los acabados. Las últimas tendencias en decoración de cocinas es una combinación de ambas técnicas, alicatando la mitad de la altura de la cocina y la parte superior pintarla, pero esta solución es más cara que pintar toda la pared. Actualmente en la cocina se admiten colores de todo tipo. Con estas sugerencias, podrás decidir qué tipo de cocina quieres tener, y sabiendo el uso que le vas a dar, te vendrá mejor una opción u otra.