La Navidad es la época de la felicidad, el momento para reunir a nuestra familia y compartir con todos nuestros seres queridos recuerdos inolvidables rodeados de regalos y comidas dignas de un regimiento. Sin embargo, después de tanta alegría llega la temida cuesta de enero. Y es que entre tantas compras y banquetes nos damos cuenta de que hemos gastado más de lo que debíamos: la Navidad nos ha hecho un agujero en el bolsillo. Mucha gente, cuando llega el momento de hacer balance, piensa que el ahorro es incompatible con la Navidad, pero esto no es así. A continuación, te damos algunas claves para que guardes algo de dinero durante las fiestas, pero sin dejar de disfrutar de esos momentos tan entrañables.
1.No a la tarjeta de crédito
El primer paso para conseguir un verdadero ahorro en Navidad es guardar la tarjeta en un cajón bajo llave hasta que terminen las fiestas. Entonces, ¿cómo vas a pagar? Es muy sencillo: con dinero en efectivo. Cuando veas que las navidades se van acercando es el momento de echar un vistazo a tu cuenta bancaria y calcular cuál es el presupuesto que quieres gastarte en estas fechas. Una vez hayas hecho cuentas de cuánto es el dinero que vas a poder usar, tendrás que dividirlo entre el presupuesto para regalos, lotería, comida, compras... Puedes guardarlo en diferentes sobres o cajitas para que la división sea más fácil. Si te toca ir de compras en busca de los regalos para tus seres queridos, sólo tendrás que llevarte el sobre de 'regalos'; en cambio, si vas en busca del menú de Navidad, te llevarás el de 'comida'. Cuando pagamos con tarjeta no nos damos cuenta del verdadero gasto que estamos haciendo y, de esta forma, tendrás controlado el dinero que has invertido. ¡Un ahorro que notarás enseguida cuando terminen las fiestas!
2.Haz tus propios adornos caseros
La decoración es otro aspecto en el que solemos gastar bastante dinero en Navidad. Y es que, aunque utilicemos los mismos adornos año tras años, siempre caemos en la compra de algo: una guirnalda de luces nuevas por aquí, una estrella para el árbol por allá... hasta que nos damos cuenta de que nos hemos precipitado con tantas compras. Un truco para ahorrarte el disgusto es hacer tus propios adornos caseros. Bolas de cristal, botellas con luces, copos de nieve... podrás encontrar muchos tutoriales sobre cómo hacer tus propios adornos. Y con esto no sólo ahorrarás algo de dinero, sino que te lo pasarás en grande y darás a tu decoración tu propio toque personal.
3.Cuidado con la decoración que consume mucho
Tener el árbol de Navidad todo el día encendido o el Belén siempre iluminado sale caro. Lo primero que debes hacer es encenderlo sólo en casos puntuales, como por ejemplo por la noche o cuando vengan invitados a casa. Sí, el árbol está precioso con la guirnalda de luces, pero a la luz del día también se verá bonito. Otro truco es comprar luces led, que consumen mucho menos que las normales. Por último, si vas a comprar nuevos adornos para tu hogar, fíjate en aquellos que tengan cristal o pequeños detalles de espejo. Y es que éstos reflejarán la luz del día o de las lámparas de tu hogar y crearán un efecto muy bonito. Además, verás como este ahorro en electricidad es notable en la factura de la luz.
4.Adelanta la compra de los regalos
¡No dejes las compras para el último día! Sabemos que es muy difícil pensar en los regalos de Navidad cuando estás en pleno verano, pero si evitas dejar las compras de los regalos para el último momento podrás ahorrar bastante dinero. Aprovecha ofertas, rebajas o días especiales como el 'Black Friday' para comprar todo lo que necesites. Es cierto que no podrás comprar todo por adelantado, pero si encuentras algunos regalos antes de la Navidad verás como tu bolsillo te lo agradece en enero. Otro error que deberás evitar es comprar por impulso cuando ves el regalo en una tienda. Antes de pagar, comprueba que no vas a poder encontrarlo más barato en otros establecimientos o portales digitales.
5.Opta por un menú de temporada
Que en Navidad sólo se puede comer marisco y carne roja es un rumor infundado. Las fiestas son una época para celebrar y disfrutar en familia, unos momentos en los que la comida pasa a un segundo plano. Este año puedes optar por elaborar un menú de temporada, utilizando productos que sean baratos durante esa época del año como algunos pescados o frutas y verduras frescas. Pero, si eres de los que no puede resistirse a un buen langostino en las navidades, también puedes hacerlo sin dejar de ahorrar. ¿El truco? El congelador. Durante las fiestas, el precio de estos alimentos se dispara hasta en 60 euros más. Para ahorrarte algo de dinero, compra todos los ingredientes que necesites antes de Navidad y guárdalos en el congelador durante el tiempo necesario. Si lo has dejado pasar y te ha pillado el toro, también puedes cambiar los productos frescos por los congelados. Éstos tienen una gran relación calidad/precio y tus invitados seguro que ni se dan cuenta.
6.Planifica los viajes con antelación
Si estás pensando hacer una pequeña escapada durante las fiestas, se previsor y planifícala con antelación. Si dejas la compra de los billetes y la reserva del hotel para el último momento, la diferencia de precio puede ser abismal. Y es que durante la Navidad los precios se disparan no sólo por las fechas que son, sino porque en la mayoría de los hoteles tendrán su ocupación casi al 100%. Así que, para evitar que las escapadas navideñas te salgan demasiado caras, lo mejor es que prepares estas escapadas con algunos meses de antelación.
7.Crea tu look especial con ropa que ya tengas
Todo el mundo quiere estar espectacular durante las comidas y cenas de Navidad. Pero si te paras a pensarlo, si tienes que comprarte un modelito nuevo para la cena de empresa, para el día de Navidad, para Nochevieja... al final te das cuenta de que has gastado más dinero del necesario. Además, los looks de Navidad es muy difícil reutilizarlos, por lo que el resultado es que te gastas mucho dinero en ropa que sólo te pondrás un par de veces. Un truco para evitar esto es utilizar ropa que ya tienes en casa, combinándola y logrando conjuntos espectaculares que te harán el centro de la fiesta. Esto no quiere decir que no puedas comprarte nada exclusivo para la Navidad. Puedes comprarte, por ejemplo, un vestido negro para la fiesta de empresa y ponértelo con una americana que tengas en casa. Luego, cuando llegue la noche de Fin de Año, puedes volver a ponerte ese vestido con tus amigos y familia y darle un toque diferente al combinarlo con una chaqueta de pedrería. ¡Todo es ponerle imaginación!