Una de las últimas inspiraciones en el hogar es la selva. Los estampados repletos de hojas grandes y verdes o todo lo relacionado con la jungla cada vez tiene más protagonismo, y es que puede aportar a un hogar bastante color, haciéndolo mucho más acogedor. Estos estampados pueden recordar al verano, pero tienen cabida en cualquier época del año. También es muy común apostar por ellos sobre todo para estancias infantiles y juveniles, donde se pueden incorporar animales divertidos.
Paredes
Estos estampados pueden quedar bien en cualquier superficie, aunque en las paredes su notoriedad será mayor. En la actualidad la selva es una fuente de inspiración para el interiorismo, y es que el papel pintado con motivos vegetales y estampados con un toque tropical destaca por ser algo moderno y no todo lo contrario.
Si te atreves con el color, apuesta por una pared empapelada con uno de estos motivos de la selva, aunque no te pases a la hora de cargar el entorno, porque dejará de ser elegante y rompedor a ser hortera y cargante. Puedes colocar una pared en tonos verdes para dar un toque alegre mientras que el resto de la estancia puede permanecer pintada de color blanco. Aunque el verde sea el color que más estaque, puedes incorporar otros relacionados, como el amarillo o colores naranjas o fucsias, que contrastan muy bien.
Suelos
En el suelo, lejos de las hojas verdes y gigantes, puedes apostar con algo relacionado con la jungla, con maderas tropicales, corcho, superficies de bambú o incluso ratán. Estos elementos trasladan a la naturaleza y más si apuestas por un parquet de madera natural, con vetas marcadas. Otra de las opciones -que además es más económica- son los suelos vinílicos, por lo que puedes reproducir de una manera sencilla la madera natural imitando la de la selva. Hay empresas que comercializan estas imitaciones de suelos o también suelos de madera natural, parquet, laminados, vinilos o tarima flotante.
Textiles
La ropa de cama, los cojines, las alfombras o las cortinas pueden incorporar estos estampados, aunque es aquí donde tienes que procurar incluir más color. Apuesta por telas de lino o esparto para el suelo. Intenta que primen las grandes hojas y flores, vegetaciones frondosas o incluso loros y otras aves relacionadas con este tipo de temática.
Igual que con las paredes, intenta no saturar, porque si incorporas muchos textiles temáticos como estos, tus paredes es preferible que se mantengan pintadas con colores neutros, lo mismo con el suelo. Y no te cortes a la hora de mezclar estampados, las cosas pueden no combinar tanto y quedar perfectas al mismo tiempo. Mezcla texturas, colores y hojas, pero sin pasarse.
Los complementos, el toque perfecto
Además de las cosas básicas que tiene que tener un hogar -paredes pintadas, un suelo confortable o unas cortinas y colchas-, puedes incorporar este toque salvaje de otra manera si no te atreves a hacerlo a lo grande. Puedes hacerlo con pufs de esparto, con cuadros reciclados y hechos a mano con ramas y hojas naturales, o con jarrones y plantas naturales.
El verde es primordial en esta decoración, pero no solo hay una manera de que esté presente en tu hogar. Además, el mobiliario típico de zonas salvajes, como hamacas colgadas, darán ese toque que tanto buscas para tu casa. Juega con la decoración y busca la manera de que pueda ser funcional a la ve que no pierde la esencia buscada. Si quieres, puedes hacer estanterías con cuerdas y madera, y usa colores tierra para contrastar, mosquiteras, madera, troncos, etc.
Además, si quieres puedes incluir en tu pared láminas y fotografías de animales salvajes, tales como leones, tigres, cebras o jirafas. También las imágenes de aves como tucanes o loros aportarán mucho más color. Y no te olvides de las plantas, ¡pero de verdad! Las plantas aportan un enorme toque de frescor al hogar y purifican el aire. Completa la decoración con tiestos de mimbre o barro, botellas verdes de cristal e ilustraciones de plantas y flores.