Cómo proceder a la decoración de tu hogar puede resultar una ardua tarea. Por ello, antes de lanzarte a la calle o navegar por Internet para comprar los muebles y elementos decorativos que harán de tu estancia el hogar de tus sueños, es imprescindible tener muy claro el estilo que contribuirá a ello: ¿clásico?¿moderno?¿vintage? Si quieres marcar tendencia y lograr un espacio relajante a la par que original, la decoración wabi-sabi es la que estabas buscando.
Aunque es una de las últimas tendencias en decoración, no se trata precisamente de un estilo moderno o contemporáneo, sino todo lo contrario. Siguiendo la filosofía de su país de origen, Japón, el paso del tiempo y la historia que se esconde tras cada elemento son clave para hacer de tu hogar un escenario con decoración wabi-sabi.
Natural e imperfecta: las claves de su éxito
Recargar tu casa de muebles y objetos de decoración puede dar sensación de agobio. Con este estilo japonés lograrás un espacio acogedor, confortable y sin florituras. La sencillez y el orden prevalecen, así como la ausencia de simetría, la cual no deberás confundir con caos o irracionalidad a la hora de decorar, sino todo lo contrario. Cada uno de los elementos que incorpores deberá colocarse con criterio y estilo.
Los materiales y tejidos naturales son la clave de la decoración wabi-sabi, siendo la madera vieja el más característico. A ello se une la imperfección de piezas artesanales (vajillas, cuencos de madera...), las cuales contribuyen a la belleza de este estilo en el que los muebles presentan una textura ruda, rural y sin tratar, rasgo característico e imprescindible para lograr una decoración wabi-sabi. No deberá haber dos piezas iguales, ganando así personalidad y huyendo de la monotonía. La conexión con la naturaleza es indispensable, para lo cual es idónea la incorporación de lavamanos de piedra, suelos de bambú o baldas de madera sin tratar.
Este tipo de decoración aboga por muebles adquiridos en anticuarios, permitiéndote conseguir piezas únicas dando a la estancia un toque de autenticidad. También servirá cualquier objeto heredado de tus antepasados, como una vieja máquina de escribir. El paso del tiempo hace de cada pieza algo único que embellecerá aún más tu hogar, pues la historia que le precede deja una huella imborrable que producirá una gran perplejidad a todo aquel que visite tu casa. Y como punto final, deberás añadir elementos decorativos naturales, como flores o piedras. Solo así lograrás un verdadero espacio wabi-sabi.
Ahora que ya conoces lo esencial de esta decoración japonesa, es necesario profundizar en algunas claves para que no tengas ninguna duda de cómo decorar tu casa siguiendo las pautas de este peculiar estilo.
Adiós a los cuadros y estanterías
Es usual encontrarse un salón cuya decoración principal se base en cuadros y estanterías. No obstante, la decoración wabi-sabi se basa en todo lo contrario, y recurre a lo meramente imprescindible. Huye de decoraciones excesivas, pues cuanta más sensación de espacio dé la estancia, más wabi-sabi será. Y, por supuesto, di adiós al brillo. Hay quien podría pensar que este estilo japonés es similar al minimalismo, pero este último se caracteriza por la geometría, la cual está totalmente ausente en el primero.
Una mesa baja de madera realizada con tablones irregulares o un objeto con aspecto oxidado son ideales para dar a tu salón un aspecto wabi-sabi.
Colores neutros como vía de relajación
La sensación de paz que transmite una estancia wabi-sabi se debe, en parte, al blanco como color protagonista. Por ello, la habitación debe presentar este color en las paredes, pero especialmente en la ropa de cama. Jugar con maletas viejas u objetos elaborados por uno mismo puede resultar interesante y muy eficaz para lograr un aspecto wabi-sabi.
Aunque el color blanco es el principal, a él se le deben unir otros colores neutros como el gris o tonos tierra, huyendo así de la monotonía de un solo color. Con esta mezcla la sensación de atemporalidad decorativa estará presente, logrando que la calma reine en el hogar. Quedan, por tanto, totalmente prohibidos los colores chillones o llamativos.
Otra clave de este estilo japonés radica en los huecos que puedan quedar en las diferentes paredes de la vivienda, los cuales pueden y deben ser aprovechados para que no queden vacíos, aunque siempre siguiendo las directrices wabi-sabi, es decir, basándote en la sencillez y en lo realmente imprescindible. Esos huecos en las paredes puedes hacerlos tú mismo/a y almacenar en ellos objetos, e incluso alimentos si los recovecos se encuentran en la cocina, como si de una despensa se tratara. Las cestas de mimbre también pueden ser grandes aliados para contribuir a la presencia de piezas artesanales, tan importantes en esta clase de decoración. Pero recuerda no excederte al rellenar estos espacios, pues la sencillez debe estar presente en cada rincón, sin dar sensación de caos ni de aglomeración.
Un jardín en tu hogar
La iluminación es uno de los puntos fuertes wabi-sabi. Una estructura de madera es ideal para las lámparas, ya que aporta sencillez y presencia de la naturaleza.
Otra manera de iluminar la vivienda siguiendo las directrices de este estilo japonés radica en la utilización de farolillos, simulando un jardín sin necesidad de salir del confort de tu hogar. Pero un jardín que se precie deberá contener plantas que le aporten alegría y sofisticación, por lo que las plantas de interior serán el complemento perfecto.
¡A por ello!
Recorre anticuarios, rastros, páginas web de objetos antiguos o incluso rebusca entre las propiedades de tus abuelos o bisabuelos. Encontrarás piezas realmente interesantes, y recuerda que con el paso del tiempo todas esas piezas se tornarán aún más bellas y únicas. Solo así lograrás una decoración 100% wabi-sabi.
No lo dudes y adéntrate en el universo wabi-sabi, con una decoración sencilla, 'imperfecta', natural, relajante y, sobre todo, con mucha personalidad. Aunque se trata de una decoración en auge, aún no es muy frecuente encontrarla en los hogares españoles. Así mismo, si quieres que tu hogar sea diferente y auténtico, ¡la decoración wabi-sabi te está esperando!