Es habitual que a muchas personas les apetezca cambiar la decoración de sus casas cada cierto tiempo para adecuarla a las últimas tendencias y novedades. Cuadros nuevos, cortinas de un color diferente o alguna que otra flor suelen ser los elementos predominantes a la hora de renovar la imagen de tu hogar, pero en los últimos años está cobrando importancia una moda que cada vez tiene más adeptos: utilizar las luces leds para dar un cambio de imagen a la vivienda. Lo cierto es que sus posibilidades son infinitas, y es que la gran variedad de tonos en las que están disponibles permite que puedan ser combinadas con casi todos los estilos de interiorismo.
Del mismo modo, se pueden encontrar en diferentes tamaños y formas que encajan con varios diseños arquitectónicos y que ayudan a que el resultado final después de la instalación quede mejor integrado. Otra de las ventajas de utilizar las luces leds como un elemento decorativo en tu casa es que apenas necesitan montaje, y es que algunos modelos incluyen una tira adhesiva que se pega en casi cualquier superficie de forma permanente. Por si todo esto fuera poco, su reducido precio también te animará a introducir estos farolillos en la ornamentación de tu hogar, llegando a costar menos de 4 euros el metro de cable en algunos sitios web.
Sin embargo, tampoco es recomendable que se te vaya la mano y que termines convirtiendo tu casa en un astro del espacio exterior. Si no quieres que todo el mundo piense que estás celebrando la Navidad de forma permanente, debes pensar muy bien dónde colocar las luces leds para no caer en el abuso y generar una sobrecarga visual. De la misma forma que ocurre con otras tendencias decorativas, estas bombillas de colores son más apropiadas para unas determinadas estancias o muebles, así que toma nota de estas ideas para no pifiarla a la hora de instalarlas.
Luces leds en el salón
La sala de estar es una de las habitaciones de la casa más apropiadas para poner unas cuantas lucecitas de colores y generar un ambiente agradable. Lo ideal en este caso será utilizar tonos cálidos que aporten una sensación de confort y afabilidad, ocultando los cables del campo de visión. Así, conviene utilizar unos modelos planos, que no superan el centímetro de grosor, para pegarlos detrás de los sofás o entre las baldas de una estantería. Otra buena idea es iluminar la zona de atrás de la televisión, para crear un entorno acogedor y no sobreesforzar la vista a la hora de ver una película o serie con la luz general apagada.
En casas con estucos o molduras en los techos, también se pueden pegar las luces leds entre los huecos de estos elementos decorativos para destacar una zona del salón o formar un espacio atractivo que incite a pasar el rato acomodado en esa habitación. En este caso, deberás asegurarte de que hay un enchufe cercano o de que el cable llegue hasta el suelo, para después cubrirlo con una canaleta que llegue hasta la toma de corriente, debidamente pintada del color de la pared.
Luces leds en el dormitorio
Se trata, sin duda, de otra de las estancias de la casa en la que más pega este tipo de iluminación. Una de las opciones que más fuerza ha cogido es la de colocar las tiras de bombillas alrededor del cabecero, aunque en esta ocasión sí se suele dejar ver el cable que las une, por lo que un modelo recomendable sería uno parecido al que se emplea para rodear el árbol de Navidad. Tú decides si prefieres que sea de colorines o de un tono en concreto, siendo esta última la mejor opción para crear ambientes determinados. Mientras que los azules y magentas generan espacios modernos y fríos, los amarillos y naranjas favorecen las sensaciones de calidez y familiaridad.
Otra de las tendencias más vistosas consiste en hacer totalmente lo contrario: colocar las luces leds debajo de la cama. En este caso, vuelven a preferirse los modelos planos en los que es más fácil disimular el cable y las bombillas, para hacer de la luz que emiten el único foco de atención. De este modo se conseguirá un efecto rompedor en el que la cama se convertirá en la protagonista absoluta del dormitorio, combinando un buen juego de sábanas y cojines con esta decoración.
Siguiendo con las luces leds en las habitaciones, conviene recordar que su función principal, más allá de adornar, es la de iluminar, por lo que colocar un juego de farollilos en el vestidor, el armario o alrededor del espejo puede aportar un toque de elegancia, distinción y practicidad de lo más adecuado. Ahora que sabes cuáles son los mejores sitios para colocar estas tiras lumínicas, solo tienes que tirar de imaginación para buscar la combinación perfecta en cada tipo de estancia.