El mundo de la lombricultura está creciendo a grandes pasos, sobre todo debido al incremento de la agricultura ecológica y como modelo a largo plazo para una agricultura sostenible. El humus de lombriz es un producto que se obtiene gracias a este proceso. A continuación, descubre más acerca de este interesante tema y del humus de lombriz:
Es el mejor abono natural
El Humus de lombriz es un producto que se obtiene del vermicompostaje. Las lombrices realizan un trabajo de compostaje mediante el cual, los residuos orgánicos biodegradables (restos de las cosechas, forrajes, estiércoles o restos derivados de la preparación de alimentos) que son insuficientemente aprovechados, pasan por su tracto digestivo quedando así un producto compostado, libre de hongos y semillas activas que se convierte en fertilizantes con excelentes propiedades, es decir, abonos con una calidad extraordinaria transformada naturalmente o carne para utilizar en la alimentación animal de crías como por ejemplo de gallinas o pescados.
Debido a este proceso microbiológico, cuyo resultado es una tierra de estructura grumosa y esponjosa que facilita la aireación y la retención de agua, ningún otro sustrato tiene un efecto igual debido a la calidad y a la cantidad de los microorganismos que contiene el humus y su origen parte mismo intestino de la lombriz. Es el resultado final de la humificación del vermicompostaje. Con la humificación se consigue la estabilidad del producto, un grado de descomposición tan alto que la materia ya no sufre transformaciones enormes.
Ventajas de este producto
Algunas de las ventajas del humus de lombriz son que tiene una gran carga microbiana de alrededor de 20 mil millones de microorganismos por gramo seco, de los que una buena parte se asocian con la raíz de la planta protegiéndola del ataque de bacterias y hongos. También aporta nutrientes a las plantas y al suelo, mejora la retención de agua y posee un pH neutro o cercano, pues depende de las materias primas y de su manejo. Además, este producto contiene una gran selección de enzimas fundamentales para la fertilidad del suelo y elementos fotorreguladores que actúan de una manera muy efectiva sobre el crecimiento de las plantas.
El sabor que percibimos cuando comemos una verdura o una fruta depende del grado de azúcares presentes. Y es que cuando cultivamos humus de lombriz estamos facilitando la asimilación de nutrientes como potasio, calcio, fósforo y otros muchos elementos minerales, lo que provoca un aumento de la floración y de la dimensión y cantidad de los frutos. Además, gracias a la acción de las bacterias beneficiosas que tiene este producto, los tejidos naturales retardan su envejecimiento y, por lo tanto, se aumenta la resistencia a agentes patógenos y a plagas. Es decir, se obtiene alimentos de una calidad superior, con un sabor más intenso y con un alto valor nutricional.
Todo esto hace que el lombricompuesto sea un excelente fertilizante orgánico y el único, prácticamente, debido a su gran elevada carga de bacterias y enzimas. Se puede utilizar en hierbas aromáticas, plantas ornamentales, florales, hortalizas, arbustos, árboles, etc.
Siempre ha existido
El humus de lombriz no es ningún producto novedoso, aunque en los últimos años se haya puesto de moda. Sorprendentemente, los agricultores hace décadas también aplicaban humus a sus cultivos. Los comienzos de la crianza de lombrices como actividad se remontan hasta 1940 en Estados Unidos. Fue entonces cuando se sentaron las bases para el cultivo intensivo de la lombriz roja californiana. Más tarde, se expandió a Europa, sobre todo a Italia. Finalmente, en 1980 fue cuando esta actividad se alzó en lo más alto gracias a la utilización de las lombrices en el reciclaje de residuos sólidos orgánicos, lo que derivó en el lombricompostaje o vermicompostaje.
Es más, la civilización sumeria sabía ver la calidad que tenían los suelos al observar la densidad de las lombrices al cavar un hoyo en el mismo. Para la civilización egipcia, las lombrices eran tan importantes que se llegaron a divinizar castigando hasta con la muerte a todas aquellas personas que las dañaran. Incluso hasta Aristóteles en su obra "Historia animalium" manifestó que las lombrices eran los intestinos de la tierra y que contribuían a su productividad.
Su origen es importante
Producir humus de lombriz de buena calidad en la industria es difícil porque el proceso de lombricompostaje es lento y requiere unas buenas instalaciones que aseguren que el resultado es un buen producto. Sin embargo, se puede confundir con facilidad al consumidor con el humus normal porque tiene un aspecto similar, pero ha seguido un proceso de compostaje por hongos y microorganismos.
Es fundamental que confíes en las empresas que te aseguran que el proceso se ha realizado bien y que te están vendiendo un producto de calidad. Hay algunas empresas que tienen sus propias explotaciones de humus y cuentan con décadas de experiencia en la producción.
Humus sólido vs Humus líquido
Los dos tipos de humus de lombriz tienen propiedades similares pero se aplican de forma totalmente distinta. La aplicación del humus en formato sólido es más pesada. Se pone alrededor del árbol y deber ser enterrado con aperos para su incorporación a las plantas o con una azada para que se mezcle con el suelo existente. Esto favorece el contacto de los microorganismos con las raíces de las plantas, a la misma vez que se protegen del frío o la luz solar. Si se hace en épocas secas es muy importante regar después de aplicarlo. Para el humus sólido basta con 0,5 kg/m2 en cultivos extensivos y al menos 2 kg/m2 en huertas.
Sin embargo, el humus líquido aporta muchos más nutrientes y es mucho más fácil de aplicar porque solo necesita un simple riego si está instalado y tiene un sistema de incorporación como un sistema venturi. Otra forma de aplicar el humus en formato líquido es diluirlo en agua y repartirlo siguiendo una dosis de 5 litros de producto en 100 litros de agua sin cloro. Esto es porque el cloro puede alterar la tasa de reproducción de los microorganismos que incorpora el humus de lombriz y la forma en la cual se va a instalar en el suelo. Este tipo de humus se aplica de 20 a 30 L/Ha, aunque varía mucho del cultivo a tratar con 2 a 4 aplicaciones a lo largo de la temporada.
Huele bien
Lo mejor de todo es que, aunque el humus de lombriz es un producto con muchos beneficios y procede del estiércol, las lombrices son capaces de hacer que el huela bien. Y es que su olor recuerda a tierra recién mojada o mantillo del bosque. Debido a su gran bio-estabilidad no se produce putrefacción o fermentación, por lo que aunque pase el tiempo no producirá malos olores. Además, es agradable tocar su estructura granulada y no mancha.