La peonía es un flor de origen asiático que se ha extendido por toda Europa, ya que se adapta muy bien a prácticamente cualquier clima. Lo bueno, además de aguantar muy bien las bajas temperaturas es que requiere muy pocos cuidados, y unidos a su belleza la convierten en un planta muy solicitada ara decorar cualquier rincón de la casa.
Temperatura y luz
Se trata de una planta resistente, así que resiste en climas de diferentes temperaturas. Soporta bien el frío y las temperaturas bajo cero, además de los climas cálidos. Pese a que se adapte a las temperaturas tanto frías como más calurosas, la luz es esencial para su desarrollo, al menos deberá recibir unas 6 horas de luz diarias. Pese a ello, es recomendable que los rayos de sol no incidan de manera directa.
Dónde plantarla
Conseguir que arraigue será la tarea más complicada de todos sus cuidados, así que hay que plantarla a conciencia para conseguir el éxito en su crecimiento y evolución. Depende del clima de la zona en la que vivas y de las necesidades de la propia planta, así decidirás dónde plantarla. Si vives en una zona cálida, la mejor opción es plantarla cerca de árboles que le proporcionen sombra en las horas centrales del día, evitando que se expongan al sol de manera directa.
También ten en cuenta la profundidad a la que la plantes. Si se trata de una peonía de variedad herbácea, de esas que alcanzan hasta un metro de altura, debe plantarse a unos cinco centímetros de la superficie para que arraigue bien. En el caso de las arbustivas, las que pueden llegar a medir hasta dos metros, deberás optar por realizar un hoyo de unos 10 o 15 centímetros de profundidad. En el caso de que vivas en un clima cálido, la peonía deberá plantarse a unos tres centímetros de la superficie si es herbácea y a unos 10 si es arbustiva para conseguir mejores resultados.
Cuándo plantar
Es importante fijarse en cuándo plantar esta flor. Para conseguir que la peonía se desarrolle correctamente hay que plantarla en una época del año en la que las temperaturas no sean muy elevadas. Lo ideal es hacerlo al inicio de la primavera, cuando las heladas hayan desaparecido en las zonas más frías.
El sustrato
La peonía necesita de un suelo fértil, también profundo, en el que poder crecer. El mejor sustrato para su mantenimiento es el cuente con una mezcla de 65 por ciento de tierra vegetal y un 35 por ciento de perlita. La perlita es muy importante para su desarrollo, ya que ayuda a mantener el grado correcto de humedad del suelo. El sustrato debe contar con un pH situado entre el 5,5 y el 7,5.
El riego
Esta planta requiere cierto grado de humedad, aunque sin pasarse. La peonía demanda ser regada de manera regular, sobre todo en primavera. Para que esté bien regada deberás echarla agua al menos dos veces a la semana, consiguiendo que tanto la base de la planta como la zona de alrededor esté húmeda, aunque sin encharcarla. Sigue la misma dinámica en verano, pero no eches tanta agua en invierno, por lo que será suficiente con realizar un único riego a la semana.
Cómo nutrirla
El fertilizante es muy importante para este tipo de planta, aunque si se usa en exceso es posible que no florezca como debe. Para mantenerla en buenas condiciones, debes aplicar el producto cerca de la base de la planta para que las raíces no se encuentren expuestas de manera directa a él y lo absorban a través del sustrato.
Para mantenerla, debes llevar a cabo dos aplicaciones anuales, aunque dependiendo de la época del año llevará cada una de ellas una formulación distinta. La primera de ellas debe hacerse en otoño y este fertilizante deberá contener un 50 por ciento de nitrógeno y un 100 por cien de potasio y sodio. Por su parte, en primavera no necesitará ni sodio ni potasio, por lo que bastará con el 50 por ciento de nitrógeno.
Enfermedades y plagas típicas
Pese a su resistencia, hay también riesgo a que sea castigada por alguna enfermedad, sobre todo aquellas relacionadas con exceso de humedad, como el moho gris. Esto se da cuando la planta no recibe todo el sol que requiere, manteniéndose húmeda demasiado tiempo. Otra de las cosas que puede afectar a la peonía es la botritis, algo que ocurre cuando se encuentra plantada en un clima demasiado húmedo. Para que se recupera hay que ventilar muy bien la zona en la que se encuentra, sin que esté cerca de otras plantas.