En el 2017 se dieron más de 105.000 robos con fuerza en los domicilios españoles. Y aunque en el mes de agosto es cuando el número de denuncias es más elevado, otra de las fechas más deseadas por los ladrones es en la época navideña. Por ello, la prevención es básica, pero las compañías de seguros destacan la importancia de complementarla con la contratación de un seguro del hogar, y es que afirman que un 24% de los españoles no lo tienen. Y en la cabeza de provincias con más hurtos en viviendas, Madrid está a la cabeza ya que sufre 50.000 robos al año.
¿Qué hacer?
Una vez haya pasado todo, hay que mantener la calma ante todo y pensar en tu seguridad. Aunque es normal sentirse frustrado e inseguro después de vivir un robo, no hay que permitir que las emociones dominen nuestras acciones al presenciarlo. Si el robo ocurre en ausencia de los propietarios, hay que estar completamente seguro de que los intrusos ya se han ido de la casa antes de volver a entrar por nuestra seguridad.
Al estar comprobar que están robando en la casa, hay que resistir el posible impulso de correr de tras de los ladrones y enfrentarse a ellos o buscarlos por ti mismo. Por ello, la mejor opción es recurrir a llamar a las fuerzas de seguridad. Los números que se deberán conocer sí o sí. Si vives en una ciudad llama a la Policía 091, en cambio, si se vive en un pueblo o ciudad donde no hay Policía Nacional habrá que llamar a la Guardia Civil 062. También se puede recurrir al teléfono de emergencias 112. Y mientras se espera la llegada de la Policía, no hay que dejar de observar todo lo que ocurre a tu alrededor. Además, también está la opción se sacar fotografías y grabar vídeos desde un sitio seguro.
Y si se tiene una alarma instalada en la casa y se puede activar con un teléfono móvil, hazlo. Puesto que no usarla puede salir muy caro, ya que si se ha declarado que se tiene alarma y cuando han entrado a robar no estaba conectada, la compañía aseguradora no cubrirá nada del robo o hurto.
¿Qué han robado? Hacer una lista
Una vez se entre al hogar lo mejor es no tocar nada, puesto que las autoridades enviarán a la Policía científica para investigar todo. Por lo tanto, habrá que evitar la alteración del entorno ya que podría dificultar su trabajo. Una vez haya terminado todo el proceso de investigación, lo mejor es hacer dos listas, una en la que se incluirán todos aquellos objetos que se han llevado los ladrones, y otra segunda lista en la que se apuntarán los objetos que han dañado mientras realizaban el hurto. Y si se tienen facturas o documentos que acrediten el valor de los objetos será de mucha ayuda.
La denuncia
Después de tener una lista detallada de todos los objetos que se han visto perjudicados y han sido robados de nuestro hogar, habrá que acudir a la comisaría más cercana para poner una denuncia. Hay que tener en cuenta que las denuncias habrá que ponerlas en menos de 72 horas. Una vez en la comisaría, un agente te explicará todos los pasos que se deberán seguir y la documentación que necesitas, como los datos de la compañía aseguradora que se tiene contratada, la lista de los bienes robados o dañados, una documentación de identidad y una copia de los documentos que acrediten la pertenencia de los bienes robados.
Ponerse en contacto con el seguro
Una vez interpuesta la denuncia del robo en la comisaría, toca llamar a la compañía con la que se tiene contratado el seguro del hogar, siempre y cuando incluya la cobertura por robo. Ya que no todas las pólizas tienen este complemento incluido, por lo que habrá que asegurarse que se dispone de esto. Aunque no tengan la cobertura por robo, algunas si contemplan un cambio de cerradura.
Habrá que comprobar que se tiene asegurado, ya que no es lo mismo tener contratado un seguro solo por el continente que también por el contenido del hogar. Por continente se entiende la estructura en sí de la vivienda y los elementos de construcción como el techo, las paredes, las ventanas o suelos. Mientras que el contenido se refiere a todo lo que hay en el interior de nuestra vivienda, pero que no forma parte de su estructura como electrodomésticos, equipos eléctricos, muebles. Por lo que a la hora contratar el seguro y, posteriormente, reclamar, es básico tener clara esta diferenciación de términos.
¿Hurto o robo?
La diferencia entre robo y hurto es un factor muy determinante, puesto que algunas aseguradoras no cubren el hurto y sí el robo. Y en caso de cubrirlo, el importe que la compañía que se tiene contratada dará en el caso de hurto será siempre menor, porque se considera una negligencia por parte del asegurado y la cobertura es menor. La diferencia entre hurto y robo es el uso o no de la violencia o intimidación. En el caso del hurto, la sustracción de los bienes de valor se ha producido de manera pacífica y sin daños. Como, por ejemplo, al dejarte una ventana abierta o se ha cerrado mal la puerta y han entrado al hogar sin hacer uso de la fuerza.
Posible desacuerdo con la peritación
Una vez se ha contactado con el seguro, enviarán un perito para comprobar todo el valor de los bienes sustraídos o dañados. Aunque es posible que una vez el perito haya hecho su trabajo, puede que la cantidad que el seguro ofrece por todo te parezca injusta, por lo que se tendrán dos opciones: reclamar a la compañía, que estudiará los daños y dará una respuesta en un máximo de dos meses, o acudir a la Dirección General de Seguros y Fondos de Pensiones, que es un organismo del Estado que podría optar por una resolución más objetiva que la de la compañía que se tiene contratada para la casa.